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El relaro de Leire

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La historia de parto

La tarde/noche del jueves ya empecé a tener alguna ola que me hizo sospechar que el parto podía estar cerca. Nos fuimos a dormir como cualquier otro día, pero a medianoche las olas ya empezaban a ser más serias y empecé a seguirlas en la app Ona. A las 5 desperté a mi pareja para que me ayudara a poner la máquina TENS. Entre la máquina y la pelota iba llevando bastante bien las olas, pero empezábamos con la sensación de que no avanzaban, no entraba en el planeta parto. Eran frecuentes, pero tolerables (para mí un 3 de 10 en intensidad).

Al mediodía, después de 12 horas de olas, decidimos ir al hospital para comprobar si todo estaban bien. Estábamos bastante seguros que nos mandarían de vuelta a casa, pero como ya llevaba horas con olas regulares (a ratos cada 5 min, a ratos cada 3 min) queríamos comprobar.

En el hospital me hicieron monitores, ecografía y un tacto, estaba de 1 cm, así que nos mandaron a casa hasta que avanzase más. También me dieron un supositorio de Buscopan para casa, por si necesitaba un alivio del dolor.

En casa seguía igual teniendo olas pero ya subiendo el nivel de intensidad y a las 17:30 usé el supositorio para poder tener una pausa e intentar dormir algo, ya que llevaba dos noches sin dormir apenas (la noche del miércoles tampoco había dormido casi nada). Pude dormir como una hora y al despertar noté que estaba empezando a perder el tapón mucoso. Las olas no paraban, llevaba la muchas horas intensas y la intensidad seguía subiendo. Me metí en la bañera con agua caliente y me ayudó a llevar mejor las olas.
A las 22:30 ya estaba a punto de tirar la toalla, sentía que a pesar de la intensidad el parto activo no iba a llegar nunca, no sentía progreso. Estaba agotada y la idea de estar otra noche más sin dormir a ese ritmo me desanimo muchísimo. Decidimos ir al hospital, yo ya desanimada pensando en epidural, inducción o lo que fuese.

Ya sobre las 23:00 me hicieron un tacto y estaba de 3 cm, que la matrona casi me lo comunicó como poco, pero a mí me animó mucho jajaja. Por lo menos había algo de progreso. En los monitores vieron que el pulso del bebé bajaba en cada contracción, así que la ginecóloga propuso monitoreo continuo y una suero intravenoso. Yo en el momento de tirar la toalla que tenía, ni BRAINS ni nada, dije a las dos cosas que sí.
Nos pasaron a paritorio sobre medianoche y empecé con olas muy intensas, ya noté un cambio, estaba de parto activo. Las llevaba bastante bien, con la pelota y mi pareja contando las respiraciones y dándome masajes en la espalda, a pesar de la incomodidad de la vía y los monitores. Como hora y media después dije que quería ir al baño y allí noté el plaf de la bolsa rompiéndose y una sensación brutal de empujar.
La matrona me hizo otro tacto y estaba dilatada completa. Me dió muchísima energía, después de casi 24 h para 3 cm había pasado a completa en menos de 2 h. Empezaba ya la fase descendente.

Esta parte se me hico un poco dura, la matrona me iba poniendo compresas calientes para ayudar, pero me parecía que la cabeza no quería salir nunca jaja, pero al final a las 2:15 mi bebé nació y me la pusieron sobre el pecho. Dejaron que el cordón se pusiera blanco y en seguida salió la placenta también sin oxitocina. Solo tenía un pequeño desgarro que hicieron un par de puntos y listo.

Nos dejaron unas dos horas en el paritorio haciendo piel con piel, excepto un momento para pesar y medir. La matrona no paraba de decirme que aunque no se había cumplido todo mi plan (vía, monitorización continua) lo había conseguido todo con mi propia fuerza que era lo que yo quería y me repetía lo bien que lo había hecho.

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